Ayer 15 de marzo hubo una manifestación en los diferentes paises Europeos, para la protección del medio ambiente y lucha contra el cambio climático, propuesto desde las generaciones más jóvenes, que cada vez están más concienciados de esta problemática a nivel internacional. A mi se me ocurrió redactar este post como apoyo y vía de aportar alguna solución más de reciclaje, en la cual también quise incorporar a mi hija Sara en su aprendizaje. Ella estaba por supuesto encantada.
Cada temporada se nos presentan desde los comercios nuevas colecciones de ropa, hogar, decoración... que nos gustan y que por supuesto queremos seguir. Comprar prendas nuevas, así como cambiar la ropa del hogar como cojines, fundas de edredón, colchas, paños de cocina, delantales.. Es bueno por diferentes motivos, promovemos la economía, los nuevos negocios, por no decir que un cambio de las telas de una habitación le dan un aire fresco y renovado, que nos motivan, y nos hacen sentir bien.
Pero ¿ qué podemos hacer con las prendas antiguas? y ¿por qué es bueno reciclar la ropa vieja?
Primero y más importante, a no ser que tengamos una casa super grande con armarios infinitos, debemos hacer limpieza de vez en cuando y vaciar. Reciclar la ropa vieja debería ser una costumbre, porque además ayudamos al medio ambiente
En Europa se desechan seis millones de toneladas de ropa al año, de las cuales solo se recicla el 25%. Para hacernos una idea el impacto de la fabricación de ropa en el medioambiente, para hacer una camiseta de algodón de 250 gramos se necesitan 2700 litros de agua.
La mayoría de los tejidos habituales, especialmente las fibras sintéticas, se tratan con muchísimos productos químicos, muy contaminantes, desde tintes hasta detergentes. Además, tenemos que tener en cuenta que tanto los materiales naturales como los derivados del petróleo (licras..) son recursos limitados. Si fabricamos ropa de manera indiscriminada y no reciclamos la que ya tenemos, el proceso se agrava.
Creo que todo lo anterior es el porque nos tenemos que animar a reciclar ropa, no solo envases, y ¿cómo podemos hacerlo?
Tenemos diversas opciones, seguramente ya realizáis alguna de las que os cuento, o podéis animaros a realizar otras nuevas:
Para colaborar en estas ideas, como ya sabéis aquellas que me seguís por facebook e instagram, en mi ciudad son Fallas, y como todos los años me gusta hacerles una cosita a mis hijos para celebrar las fiestas. En esta ocasión también ha aportado su granito de arena mi hija mayor Sara, dando sus primeros pespuntes a máquina, ella ya me lo había pedido hace tiempo pero a mi, la verdad, me daba miedo que se pudiera clavar la aguja. Finalmente me convenció y con el forro de una de sus cazadoras viejas que yo había guardado ya hace un tiempo, hicimos los forros de estos bolsos de fallera, quedaron super monos y prácticos. Y mi hija super orgullosa de haber colaborado en hacer algo nuevo con sus manos.
- La primera forma de reciclaje es la más sencilla; darle una segunda oportunidad a la prenda. Guardarla seguro que esa moda vuelve.
- Segundo, podemos modificarla, coserle nuevos botones, cremalleras, puntillas, cortarla, ponerle apliques ... a lo que nuestra imaginación y creatividad nos lleve. Además será una practica forma de ocupar nuestro tiempo libre, ahorramos dinero y tenemos ropa "nueva".
- Otra forma seria llevarla al mercado de segunda mano, ya que este tipo de comercio cada vez tiene más auge, incentivando el comercio ya que el estilo vintage siempre esta de moda.
- Una opción más solidaria, seria donarla a los más necesitados, bien recurriendo a los contenedores destinados a ello o bien a organizaciones dedicadas a la función de ayudar a personas sin recursos. Aquí me gustaría recordar que ha de estar en buen estado y limpia.
Para colaborar en estas ideas, como ya sabéis aquellas que me seguís por facebook e instagram, en mi ciudad son Fallas, y como todos los años me gusta hacerles una cosita a mis hijos para celebrar las fiestas. En esta ocasión también ha aportado su granito de arena mi hija mayor Sara, dando sus primeros pespuntes a máquina, ella ya me lo había pedido hace tiempo pero a mi, la verdad, me daba miedo que se pudiera clavar la aguja. Finalmente me convenció y con el forro de una de sus cazadoras viejas que yo había guardado ya hace un tiempo, hicimos los forros de estos bolsos de fallera, quedaron super monos y prácticos. Y mi hija super orgullosa de haber colaborado en hacer algo nuevo con sus manos.
A continuación os dejo algunas fotos del paso a paso:
Espero que os haya gustado el post y recordar ser felices. Ah! y felices fallas a los que sois de Valencia y a los que no, venir a visitarnos.
Me ha gustado mucho tu post ,es verdad que gastamos mucho en ropa, y que acumulamos más que necesitamos, es buena idea lo de utilizar estás prendas para manualidades. Gracias
ResponderEliminarGracias por tu comentario, lo de reciclar telas ya lo sabían nuestras abuelas, la mayoría utilizaba la ropa vieja o las sabanas rotas para hacer trapos de limpieza o de cocina....
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